El demonio y el pozo
Escrito por Carla Pérez, de 1ºC
Unos niños llamados
Óscar y David vivían cerca de Godelleta. Iban a celebrar Halloween
en casa de Óscar. Para ello, decidieron cenar hasta las once y luego
se fueron a dar un paseo y a contarse historias de miedo. Fueron por
un caminito de piedras hasta llegar a un descampado, allí había un
pozo abandonado y profundo lleno de siniestros sonidos. Decidieron
que era el lugar perfecto.
Estuvieron un buen rato
contándose historias espeluznantes: “En un día de luna llena como
hoy...”
¡Plof!
 |
| En el pozo había un demonio... |
Se quedaron inmóviles
hasta que la chica les preguntó si estaban bien. Ellos le
preguntaron qué hacía allí y le dijeron que la ayudarían a salir.
La mujer demonio
estuvo relatando lo que le pasó; solo podría salir si encontraban
su cuerpo muerto de humana y lo tiraban al pozo.
- ¿Y... no te acuerdas
de dónde moriste?- Dijo Óscar.
- No, solo me acuerdo de
que era un sitio apagado, chirriaba el suelo y crujían las paredes-,
contestó ella.
- ¡La vieja mansión!-
Gritaron los dos amigos a la vez.
- Tranquila, nosotros te
ayudaremos, ahora mismo vamos a buscar tu cuerpo.
Óscar y David fueron
hacia la mansión que estaba en el bosque. Ese lugar daba mucho
miedo, parecía que no lo hubiera pisado nadie hace cientos de años.
Entraron, estaba lleno de telarañas, polvo y agujeros en las
paredes, siguieron un largo pasillo hasta llegar a una puerta cerrada
con llave, pero con el tiempo la puerta se había desgastado, así
que de una patada se podía tirar abajo. Cuando consiguieron abrirla,
vieron un cofre muy grande en el que había una muchacha muerta, pero
hermosa, rubia, de ojos grandes y labios aún carnosos. Sin duda era
ella. Cogieron el cofre y lo llevaron a rastras hacia el pozo, así
ella podría descansar en paz.
Ellos obedecieron,
tiraron su cuerpo. Ella les dio las gracias por su valentía y les
dijo que cada vez que la necesitaran, los días de luna llena estaría
ahí. “Pero no habléis de esto a nadie”, les pidió ella.
Felices de haber
podido ayudar a esta hermosa muchacha, asintieron con la cabeza
prometiéndole no decir nada a nadie. Sería su mayor secreto.
La leyenda de la niña
del lago.
Escrito por Andrea Arnau, de 1ºD
Érase una vez, en un
pueblo llamado Godelleta en el que habitaba poca gente, una familia
de clase obrera con la que el pueblo no quería hablarse. Se decía y
se rumoreaba que una de sus hijas murió asesinada en el lago de
las luces verdes. Cuentan que una noche de luna llena, Sara y
Blanca salieron a pasear y aprovechar dicha luna para bañarse.
Cuenta Sara, que fue la niña superviviente y que todavía está
traumatizada, que cuando iban por el camino hacia el lago vieron unas
luces verdes a lo lejos. Ellas pensaron que podría ser el reflejo de
algún foco lejano, no le dieron importancia y siguieron hasta llegar
al lago.
Sara y Blanca, como
niñas que eran, no pensaron en el peligro que podían correr, se
metieron en el agua y disfrutaron del baño hasta que notaron que las
aguas se movían y era raro ya que en este lago no hay corriente
alguna. Sara empezó a tener miedo y decidió irse, sin embargo, su
hermana, decidió quedarse, pues vio en el fondo unas luces verdes la
hipnotizaron.
 |
| El alma de la niña estaba atrapada en el lago |
Sara regresó con sus
padres al lugar para buscar a su hermana y cuando llegaron al lago,
vieron cómo las aguas atrapaban a su hermana desde el fondo. Aunque
intentaba librarse no podía y poco a poco iba cansándose y
hundiéndose cada vez más.
No pudieron hacer nada
y las luces verdes y la niña desaparecieron. Cuentan los habitantes
de Godelleta que en dicha fecha del año coincidiendo con la luna
llena, nadie va al lago a bañarse por miedo a que se le aparezcan
las luces. En realidad, nunca se supo qué eran y personas que han
querido averiguarlo dicen que han visto en el reflejo del agua el
alma de aquella niña muerta. Por eso lo llaman el lago de las
luces verdes y aún los
científicos intentan averiguar las curiosidades inexplicables de
este lago. Pero hoy en día no existen medios suficientes para
averiguar las causas de lo que sucedió en la leyenda.
Aún
hoy el alma de Blanca sigue atrapada dentro del lago.
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